Datos de la religiosidad española y catalana.

El tema religioso está en el punto de mira de este país dada la visita de Benedicto XVI. Además de plataformas de apoyo y crítica surgen en debates y artículos en los principales medios de comunicación. Uno de estos artículos publicado hoy en El Periódico, que podéis leer aquí, habla sobre los último datos del barómetro del CIS que reflejan el sentimiento católico español y catalán. He aquí un resumen hecho por El Periódico:

Identificación con el catolicismo:

• En 20 años se ha pasado de contar con un 90% de la población española que se declaraba católica al 73%.
•  En Cataluña el porcentaje de personas que se consideran católicos es del 65%. De esos catalanes que se consideran católicos sólo el 13% van a misa los domingos y festivos.
• En Galicia los católicos son el 83% de la población. De los gallegos que se consideran católicos sólo el 20% asiste a la iglesia los domingos.

Situación de los seminarios en Cataluña:

• Según datos de la Conferencia Episcopal Española 2009-2010 los aspirantes a sacerdocio son uno por cada 36.000 habitantes. 
• En Cataluña la proporción de aspirantes a sacerdocio es de uno por cada 60.000 habitantes.
• En el 2009 se ordenaron 116 sacerdotes en España, uno de cada 320.000 habitantes.
• Para el mismo año en Cataluña fue de 11 sacerdotes los se incorporaron a los obispados catalanes, siendo la proporción de uno por cada 627.000 habitantes.

Jóvenes: 

• Los jóvenes entre 15 y 29 años son el grupo de edad menos identificado y representado con el catolicismo.
• De este grupo de edad se consideraban en 1992 católicos el 82%. Actualmente el número de jóvenes que se consideran católicos es la mitad.

La fe en la Iglesia Católica ha experimentado un notable descenso en estos años de democracia. Sin embargo no se ha notado un descenso del poder de la Iglesia en el Estado, en los medios de comunicación, en las leyes, en la cultura, en la educación y en otras importantes instituciones. La Iglesia pese a que va perdiendo fieles sigue aumentando su poder recaudatorio en España y las facilidades que ha puesto el Gobierno ante la visita del Papa. Es por ello que hay que corregir esta situación, hay que denunciar los privilegios que tiene la Iglesia Católica respecto a otras religiones, los privilegios que tiene esta institución ante una sociedad cada vez menos fiel a su ideología adoctrinadora y dogmática.

Ayer hubo en Barcelona una protesta en la Plaça Sant Jaume, frente al Palau de la Generalitat, que defendía una sociedad laica sin el intrusismo eclesiástico que ha sido patente en este país desde hace muchos siglos. Tuve la fortuna de asistir a esa manifestación donde se vieron representadas muchas voces. Desde mi humilde y pequeña madriguera ser otra de las voces que expresan un contundente: